Hoy en día es sabido y aceptado por casi todo el mundo que el deporte no es sólo una actividad física, sino también una recuperación mental.
Porque las hormonas endorfinas y serotonina segregadas durante la práctica deportiva te hacen sentir feliz. Sin embargo, algunos errores cometidos durante el ejercicio o movimientos aplicados incorrectamente pueden causar más perjuicios que beneficios.
La lumbalgia causada por movimientos incorrectos es uno de los principales problemas de este tipo. Dado que la región lumbar es el centro de gravedad del cuerpo, cualquier dolor que pueda producirse aquí afecta a todo el cuerpo en general.
Por lo tanto, la prevención del dolor lumbar durante las actividades deportivas es de gran importancia.
¿Qué es la Lumbalgia?
La lumbalgia es un dolor agudo o contundente en forma de molestia, dolor, quemazón o escozor. Aunque en algunos casos su ubicación puede determinarse puntualmente, en otros está dispersa y no puede localizarse con exactitud. Puede ser leve o grave y presentar altibajos.
El dolor puede tener su origen en un hueso, cartílago, músculo, cápsula articular, ligamento, disco o vaso, y no siempre es posible determinar la causa exacta. En algunos casos, el dolor puede persistir incluso después de que la causa subyacente del dolor haya desaparecido, porque las terminaciones nerviosas que una vez fueron estimuladas siguen enviando señales. El estrés también es una causa importante de lumbalgia, lo que puede dificultar la identificación del origen.
Sea cual sea el tejido en el que se origine el dolor lumbar, si los tejidos relacionados se comprimen sobre los nervios desplazándose o expandiéndose y engrosándose, puede acarrear problemas como dolor de piernas, entumecimiento, calor e incontinencia urinaria.
¿Cuáles son las Causas del Lumbago?
La carga sobre los nervios de la columna vertebral o los discos de la cintura al hacer deporte se considera una de las primeras causas de lumbalgia. Además, la fuerza aplicada sobre los tendones y los músculos o la tensión excesiva en los ligamentos también desencadenan lumbalgia. La zona lumbar es la más expuesta a estas tensiones durante el entrenamiento con pesas.
Factores como levantar más peso del que el cuerpo puede soportar o para el que está preparado, el entrenamiento con pesas prolongado o levantar el peso de forma incorrecta provocan dolor y molestias en la zona lumbar. Los movimientos combinados realizados sin calentamiento también pueden provocar dolor en la zona lumbar.
Por ejemplo, movimientos como inclinarse hacia delante y hacia los lados repetidamente, forzar la cintura mientras se dobla hacia atrás y girar tensan los músculos de la zona lumbar. En los deportes basados en estiramientos, como el pilates, el yoga y similares, no poder acomodarse correctamente al movimiento o forzar los músculos que no están suficientemente estirados por encima de su capacidad también puede provocar lumbalgia.
Relación Entre el Dolor Lumbar y la Actividad
En general, se cree que hay que evitar las actividades cotidianas y pasar el tiempo tumbado. Sin embargo, especialmente en caso de dolor agudo, se recomienda mantenerse activo «mientras se tolere». La actividad continuada mejora el flujo sanguíneo, reduce la inflamación y la tensión muscular.
La gente suele decir que se siente mejor después de realizar ejercicios cardiovasculares sencillos, como caminar. Deben evitarse actividades como el levantamiento de pesas y los deportes de competición y de contacto.
La aplicación en frío o en caliente será útil en diferentes situaciones. La aplicación de calor también puede aumentar la relajación muscular. Sin embargo, la contribución de estas aplicaciones a la recuperación a largo plazo no se ha demostrado plenamente.
Cómo Prevenir el Dolor Lumbar
- Una de las principales formas de prevenir la lumbalgia es no forzar demasiado el cuerpo y conocer sus límites. La cintura no debe cargarse más de lo que puede soportar y la cintura no debe sobrecargarse.
- Calentar antes de entrenar y estirar después reduce significativamente el dolor físico. Al igual que en un coche, acelerar sin calentar o frenar sin reducir la velocidad puede dañar todo el cuerpo, especialmente la cintura y el cuello.
- Si estás siguiendo un programa de entrenamiento para aumentar la masa muscular y la fuerza corporal, empezar con ejercicios sencillos, pasar a fases más difíciles a medida que se desarrollan los músculos y aumentar gradualmente la rutina deportiva evitará daños en la zona lumbar.
- Utilizar el equipamiento adecuado durante la práctica deportiva y, sobre todo, elegir un calzado adecuado para el entrenamiento que vas a realizar también te hará sentir más cómodo.